Es normal que las madres y los padres de familia sientan preocupación por el inicio de la vida sexual de sus hijas e hijos y muchas veces no les resulta sencillo hablar con ellas o ellos de este tema, por lo que dejan la responsabilidad a la escuela o a otros medios; sin embargo, es importante que dentro del espacio familiar haya la posibilidad de hablar del tema.
En una encuesta realizada con alumnas y alumnos que cursan la educación media superior, se encontró que las y los jóvenes prefieren recibir la información sobre sexualidad de su mamá o su papá, más que de sus maestras, maestros, amigas o amigos. En esta misma encuesta se encontró que no hay una conciencia clara del riesgo que implica la falta de cuidado en las relaciones sexuales.
Por estas razones, es importante que como madres o padres de familia hablemos con nuestras hijas o hijos acerca de su sexualidad, de cómo se sienten al respecto e incluso de lo que a nosotras o nosotros nos preocupa, de los riesgos que pueden enfrentar.
